¿Qué perspectivas tendrá el turismo internacional después del verano 2021?
La pandemia mundial de la COVID-19 ha provocado un impacto totalmente adverso a todas las
economías del planeta.
Las afectaciones han sido diferentes para cada una de ellas de acuerdo con diversos factores que van desde su nivel de desarrollo, de desigualdad social y hasta de acuerdo a su especialización productiva.
En este contexto, al interior de cada país, las economías locales han sufrido sustanciales afectaciones y otro tanto ha pasado con las regionales basadas predominantemente en el turismo.
La disminución de los flujos de turistas tanto nacionales como extranjeros ha sido el principal impacto, lo cual ha colapsando el nivel de empleo e ingreso y ha afectado la capacidad de compra y por ende, la circulación monetaria en el mediano plazo.
Los primeros seis meses de 2020 se tornaron letales en cuanto al esparcimiento de la pandemia y la situación se agravó ya en la segunda mitad de ese año, situación que prosiguió empeorando durante el actual año con la aparición de nueva cepas del virus como su variante Delta, altamente contagiosa y mortífera, todo lo cual paralizó a nivel internacional la industria turística.
La pandemia, calificada por la OMS como la peor en los últimos cien años, trajo consigo una estrategia de distanciamiento social, lo cual afectó de manera determinante a las industrias dependientes de una fuerte dinámica social, como lo es el turismo.
Tal distanciamiento social trajo consigo un paro total en múltiples actividades y un cierre de fronteras generalizado.
El desastre mundial ocasionado por esta situación condiciona un futuro para el turismo donde la industria tendrá que readaptarse a las nuevas condiciones en las que el virus habrá sido contenido en un alto porciento pero sin desaparecer del todo, aún en los escenarios más favorables.
La Organización Mundial de Turismo (OMT) de las Naciones Unidas ha previsto un amplio paquete de medidas sanitarias preventivas para los medios de transporte, instalaciones, actividades turísticas y el personal que incluyen el distanciamiento, la desinfección constante de manos, locales y utensilios, la creación de puestos de trabajo que faciliten el control de la higiene y la asesoría del personal de servicio y de los turistas y el empleo de abundantes medios de desinfección.
A partir del punto de giro introducido por la pandemia en la actividad turística internacional los turistas post Covid deberán contar con elementos que consoliden su confianza durante sus viajes y estancia en los destinos elegidos.
La salud como una prioridad
Además de las normales exigencias sobre la comodidad y la calidad de los servicios, contarán con la seguridad en materia de salud y en ello jugarán un papel determinante el distanciamiento, el uso de las mascarillas y las medidas de higiene personal y de locales y utensilios, todo lo cual serán puestos a su disposición en los distintos destinos y medios de transporte por parte del personal de servicio que les atienda.
Flexibilización de las reservas
Si bien el factor precio seguirá siendo crucial, adquieren mucha importancia las condiciones de reserva respecto a facilitar cancelaciones, cambios y reembolsos, para estimular así la demanda y generar confianza. Con la situación de pandemia actual se ha tenido que reconvertir la forma tradicional de comercializar los productos y servicios turísticos debido a la incertidumbre.
El turismo de lujo como opción
En la recuperación, se prevé que las marcas premium vayan en auge, así como también todo lo relativo al segmento del lujo. Esto significa que los turistas podrán acceder, de manera creciente, a servicios privados por los cuales, si bien pagarán más, disfrutarán de servicios privados, productos exclusivos y ventajas que reducirán su contacto con otros huéspedes o pasajeros y garantizarán más su confianza y seguridad.
De moda los viajes domésticos
Las “staycation” dejarán de ser una tendencia alternativa para emerger como una opción preferencial por largo tiempo como una forma más segura de turismo en cuanto a la preservación de la salud, en tanto predominan las actividades al aire libre y en ambientes sanos.
Según las estimaciones de los expertos, el proceso de recuperación del turismo se hace visible ya en este último trimestre de 2021 pero no se prevé una recuperación significativa del mismo hasta la primavera de 2022.
¿Qué destinos turísticos podrán recuperarse de cara al venidero año 2022?
De entre los 20 países considerados como mayores receptores del turismo mundial, siete de ellos como Austria, Canadá, China, Singapur, Malasia, España y Australia cerraron sus accesos terrestres, marítimos y aéreos durante 2020, en tanto otras 44 naciones implementaron cierres de fronteras condicionados, esto es, limitando el ingreso en función de la procedencia.
Otros grandes receptores turísticos como Estados Unidos, Francia y Alemania aplicaron ese tipo de medidas al igual que Turquía, Japón y Hong Kong, así como también los más significativos de América Latina y el Caribe, considerados otros importantes destinos internacionales.
El panorama ha comenzado a cambiar en esta segunda mitad del 2021 y el Observatorio de Turismo Emisor en España (ObservaTUR) prevé una mejoría más rápida para la actividad turística en las principales capitales europeas.
Ya en el actual año, en todos esos polos de atracción turística se han venido implementado intensos programas de vacunación que van dando promisorios resultados en lo referente a la disminución de los contagios y las muertes por la pandemia.
Los casos de México, Argentina y Cuba, en los cuales se observan buenos niveles de inmunización como consecuencia del avance de la vacunación, exhiben innegables índices de control de la pandemia y ello repercute en el avance de la normalización de la vida. Se trata de un hecho que repercutirá muy favorablemente para esas naciones en la reanimación del turismo como destino internacional y así mismo también para el doméstico.
En todos los casos mencionados se produce progresivamente una paulatina relajación en las medidas de movimiento fundamentalmente, así como también en la reanudación de actividades muy relacionadas con la industria del ocio, como la reapertura de restaurantes, cafeterías y otros locales de servicio y el reinicio de acciones de esparcimiento como la asistencia a teatros, cines y museos, con preferencia hacia aquellas que se realizan al aire libre.
Según los últimos reportes de la OMT, de acuerdo con las estimaciones de los profesionales de las agencias de viajes, las playas nacionales, tanto peninsulares (74%) como insulares (72%), serán los destinos turísticos que primero se recuperarán tras la pandemia.
Publicaciones especializadas señalan asimismo al turismo de naturaleza en sus distintas variantes (Ecoturismo, Turismo de Aventura y Turismo Rural) y al de salud, como variantes que tendrán tendencia a una rápida recuperación.
No obstante la mayoría de los turoperadores estiman que los parques temáticos, los viajes a larga distancia, los cruceros y los paseos de nieve, serán los destinos que más tardarán en volver a los niveles de preferencia que tenían antes de la crisis.
¿Qué destinos turísticos seguirán sufriendo afectaciones de consideración durante el venidero 2022?
De cara al resto del actual año 2021 y para el venidero 2022, la OMT considera los destinos de la región de Asia y el Pacífico, junto a los de África, como los que más tardarán en recuperarse.
La región de Asia y el Pacífico obtuvo los peores resultados en el periodo de enero a julio de 2020, con una caída del 95% en las llegadas internacionales en comparación con 2019. Oriente Medio registró la segunda mayor caída en ese mismo período (-82%), seguida de Europa y África (ambas -77%). El panorama durante todo el actual año 2021 prosiguió con muy desalentadores indicadores para esas regiones del mundo. Si bien para la mayoría de los destinos de Europa se prevé una mejoría asociada a la disminución en los indicadores de la pandemia, no sucede así con los de Asia, Pacífico y África, lo cual está asociado a los bajos niveles de inmunización de sus poblaciones y por tanto al sostenido alto índice de contagios y muertes por la Covid 19 y ello acarrea una gran desconfianza en los potenciales visitantes